Quisiera tener alas y emprender el vuelo
con los pétalos hasta el fin del mundo.
¿Pero quién sabe si allí existe
una tumba donde enterrar fragancias?
Mejor en bolsas de seda recoger sus restos de aroma
y en la limpia tierra, como una tumba, sepultarlos.
Pues puros partirán como puros llegaron:
sin dejarse cubrir por el sucio fango.
Lin Daiyu. Sueño en el pabellón rojo
Es tan notablemente perniciosa la influencia de Internet que desde el año 2000 apenas se hacen películas buenas. Sí se hacen series buenas, ese es otro ciclo, porque pertenece a la televisión como medio, y además se ha adaptado muy bien al formato digital.
Pero el cine en sí está muerto. Su producción es más extensa que nunca, los equipos de realización en vídeo se multiplican exponencialmente, pero los resultados son mediocres, sino directamente malos.
Haciendo un barrido por toda la producción cinematográfica del siglo XXI solo he encontrado cinco películas buenas, teniendo en cuenta que no he repetido director, aunque tenga otras también seleccionables.
Son estas:
El viaje de Chihiro 2001 Hayao Miyazaki Animación
